Lágrima

Quiero gritar, quiero explotar, quiero saltar, quiero llorar y tantas cosas quiero a la vez que no sé por cual empezar. Lo sé, debo controlarme. Particularmente no me gusta expresar mis emociones, quizás solo cuando estoy alegre mas no cuando decaigo y siento que mis fuerzas se desvanecen y una lagrima quiere caer sin mi consentimiento  pero la reprimo, la reprimo porque no me gusta sentirme derrotada, si bien sé he aprendido a perder(y con buena y mala cara), no me gusta sentirme abatida. Me gusta sentirme fuerte, realizada, superada y si caigo, me levanto.

He aprendido a controlar mis emociones y bien, no he dejado que la lágrima caiga. Es cierto me reprimo, pero lo hago por mi bien y cuando llega el momento de desfogarlo todo, lo hago en la profunda soledad y en el significativo silencio, porque puedo reflexionar, pensar y enmendar mis errores y procurar no volverlos a cometer, porque soy humana y así como lo cometí una vez, puedo cometerlo 2 veces, pero la 2da vez que lo cometa, dependerá mucho de mí y de cuanta voluntad puedo poseer para enfrentarlo y dejar ir aquellos momentos que solo me llenan de nostalgia.

Dicen que recordar es malo ¿En verdad lo es? Para mi es simplemente retroceder el tiempo, evocar, sonreír y darte cuenta de lo fuerte o débil que pudiste ser y a partir de ello, sacar más fuerzas y más lecciones por aprender, porque aunque todo se torne negativo, siempre hay algo positivo que rescatar. Yo me considero una persona realista, aunque algunos quieran llamarlo negativa, pero es que la realidad no es como la pintan las telenovelas o las películas románticas. La realidad es otra, donde las personas se esfuerzan por conseguir algo, y pueden lograrlo como no, eso ayudará a que las cosas no te tomen por sorpresa. Yo aprendí eso, lo llevé a cabo y me funcionó. Sabía lo que podía pasar (sin embargo) y poco a poco me hacía conciencia de eso y no me equivoqué, PASÓ, y si jamás hubiera sido realista de aquella situación, ahora no estaría escribiendo esto, incluso, las manos me temblarían al escribir y no hubiera podido retener esa lagrima en mí que lo único que hace es hacerme pensar que puedo estar arrepentida.

No me arrepiento de nada, porque mis errores me seguirán ayudando a mejorar como persona, mis aciertos a darme cuenta que poco a poco voy creciendo y lo que la gente me haga, me hará caer en la cuenta que donde me encuentro, todo a mi alrededor, ES REAL.

Y cualquier parecido con la realidad, no es coincidencia.